Observar cómo anidan los pájaros en tu jardín puede ser muy gratificante, sobre todo si están a salvo en una caja nido. Estas cajas nido son un sustituto ideal de los agujeros en los árboles. En muchos parques y jardines hay gran cantidad de comida para pájaros pequeños, pero no hay lugares donde puedan anidar… hasta que se instala una caja nido. En ekoideas encontrarás las cajas nido Schwegler, muy duraderas, decorativas y prácticas para diferentes especies de aves.
Y es que con más de cincuenta años de experiencia, Schwegler es una marca alemana de reconocido prestigio en toda Europa, especializada en la fabricación de cajas nido y protectores de fauna. Sus productos están destinados a conservacionistas, investigadores, agricultores, ingenieros forestales y particulares. Las cajas nido Schwegler se desarrollan atendiendo el comportamiento y necesidades de la fauna. También se tienen en cuenta los criterios estructurales y estéticos, para que encajen en los espacios donde van a colocarse. Por ejemplo: estas cajas nido reflejan orificios naturales y los colgantes permiten a los árboles seguir desarrollando su crecimiento. Schwegler ha vendido más de 8,5 millones de casetas de cemento-madera en todo el mundo.
En general, los diseños de Schwegler dan la oportunidad de sobrevivir a todo tipo de aves en una sociedad modernizada llena de peligros para los pájaros. Por ello, Schwegler es un referente en cuanto a la divulgación de la protección natural a través de libros ilustrados para niños y otro material didáctico (DVD’s, tableros, pósters, etc).
• Materiales, ubicación y limpieza
El impacto ambiental de las cajas nido Schwegler es mínimo, tanto en su fabricación como después de su vida útil (garantizada durante 25 años). En ekoideas disponemos de cajas nido fabricadas con cemento-madera, un producto desarrollado y patentado por Schwegler, completamente natural que se compone de un 75% de madera y varios aditivos para compensar los cambios climáticos. Esta mezcla proporciona aislamiento contra las fluctuaciones de temperatura, permite que el aire pase a través de las paredes, y evita la formación de condensación que se produce a menudo en cajas nido de plástico, piedra o totalmente de hormigón. Además, el cemento-madera es mucho más duradero y resistente a la intemperie que la madera, y es lo suficientemente fuerte como para soportar la atención de los pájaros carpinteros.
Para fijar la caja, a menos que haya árboles o edificios que hagan de escudo, es mejor colocarla entre el N y el SE, evitando la luz directa del sol y los vientos fuertes. Si es necesario, debe inclinarse ligeramente la caja hacia delante de modo que la lluvia no entre por el agujero de entrada. Si decidimos ponerla en un árbol, como los árboles crecen, debemos revisar el anclaje cada dos o tres años.
Para su limpieza, el agua hirviendo matará los parásitos que puedan existir en la caja, evitando la infección a los pollos. Esta actividad debería hacerse entre octubre y noviembre. También se puede aprovechar para retirar los huevos no eclosionados o los cadáveres de los jóvenes muertos. Un puñado de heno limpio o de serrín (nunca paja) colocado en la caja después de la limpieza, proporcionará más calor durante los meses de invierno, tiempo en el que los pequeños mamíferos y algunas aves utilizan la caja para invernar o dormir, respectivamente. No se debe inspeccionar la caja durante la época de incubación o cuando los pollos sean muy pequeños. Éste puede ser el motivo del abandono del nido por parte de los padres.
• Aves
Son muchas las especies que pueden ocupar una caja nido. Los páridos, herrerillos y carboneros, son las más familiares y las que mejor se adaptan, pero se conocen muchas otras más que también las utilizan: trepadores, gorriones (común y molinero), estorninos, petirrojos, vencejos, autillos, cárabos y cernícalos se encuentran entre ellas. Su uso depende sobre todo del tamaño de la caja y de su situación. Contemplar como anidan siempre es un placer.
Para herrilleros y carboneros es recomendable colocar la caja nido entre 2 y 7 metros de altura; para papamoscas entre 2 y 5 metros. Un truco para proteger la caja nido de depredadores (gatos, ardillas, ratas, ratones, comadrejas, pájaros carpinteros y algunos córvidos) es colocar la caja encima de un rosal.